Frío, lluvia, días cortos, bajo estado de ánimo... No faltan excusas para entrar en una larga hibernación en el sofá. Y ¡saludos kilos de más! Aquí tienes 5 consejos para adelgazar en invierno.
1. Evita salir con el estómago vacío
Estar a tope este invierno puede ser una misión muy delicada, ya que las veladas dedicadas a la "buena mesa" son habituales. Raclette, fondue, tartiflette, crêpes y chocolate caliente... Cuanto más graso, más salado, más dulce, más lo aprecian nuestras papilas gustativas. Nuestras nalgas mucho menos, ¡obviamente!
Está científicamente demostrado que cuando comemos fuera, tendemos a consumir muchas más calorías que cuando comemos en casa. Simplemente porque hay muchas más tentaciones.
Así que no te saltes ninguna comida porque estés planeando una fiesta de pizza con tus amigos. En lugar de eso, llénate de fruta y verdura rica en fibra. También puedes morder una manzana antes... Te apetecerá mucho menos atiborrarte.
2. Ejercicio, ejercicio y más ejercicio para el invierno
No es ningún secreto que para adelgazar en invierno hay que moverse todo lo posible. Pero cuando está oscuro y hace frío, las tardes de zapping sustituyen rápidamente a nuestras sesiones de running.
Artes marciales, yoga, aquabiking, danza... ¡no faltan opciones para moverse sin pasar frío! Y no hay nada como las actividades en grupo para motivarse mutuamente.
También puedes hacer más salidas para disfrutar del aire fresco. ¿Prefieres quedarte en casa? Entonces desempolva esa bicicleta estática con la que no sabes qué hacer. En resumen, ya has entendido el principio. ¡A motivarse!
3. Dormir mejor
Para adelgazar en invierno, aprenda a contar ovejas, como si fueran kilos que perder... La relación entre el sueño y la pérdida de peso está bien establecida. Cuanto más cortas sean sus noches, más tenderá a aumentar su peso.
¡Eso dicen los científicos! Cena (ligero) al menos dos horas antes de irte a dormir.
4. Recuerda mantenerte hidratado aunque no tengas sed
Té verde, guaraná, yerba mate, limón, hinojo, diente de león, tallos de cereza, pensamiento silvestre, bardana, grosellero negro, ulmaria... ¡Hay donde elegir! Sus poderes diuréticos y/o desintoxicantes son bien conocidos. Estas infusiones son el mejor medio para depurar nuestro organismo y eliminar el exceso de agua.
¡Y el vientre plano es nuestro! Por la mañana, también preparamos buenos zumos de frutas, llenos de vitaminas y antioxidantes. Sin embargo, el agua sigue siendo el mejor líquido que puedes beber. Y no alcohol: no hidrata (pero para nada).
5. Cocina buenas sopas
Para adelgazar en invierno, ¡nada mejor que unas buenas sopas caseras! Sí, comer comida caliente en lugar de ensaladas veraniegas no significa acumular calorías. Así que coge tu cesta y dirígete a tu huerto favorito para abastecerte de verduras de invierno.
¿Te gustan los platos con salsa de toda la vida? Opta por su versión light para darte un capricho sin sentirte culpable.